El agua es imprescindible para todos los seres vivos. Más de un 70% de nuestro cuerpo es agua y constantemente intercambiamos agua con el exterior, para cubrir nuestras necesidades metabólicas. Por eso necesitamos beber y cuando comemos, también incorporamos el agua que hay en los alimentos.
En muchos países el agua es muy escasa y sus habitantes no tienen agua potable para beber y sin embargo nosotros empleamos agua potable en las cisternas de nuestros inodoros.
Dado que nuestras ciudades no están preparadas para utilizar aguas depuradas para estos menesteres, conviene que seamos más cuidadosos y procuremos gastar solo el agua imprescindible en las cisternas.
----EL PROBLEMA
--------La cantidad enorme de agua potable que se malgasta en las cisternas de nuestros aseos.
----DOS SOLUCIONES
--------Regular la boya para que la cisterna coja menos agua (si se sabe hacer)
--------Poner con cuidado, dentro de la cisterna, uno o dos objetos que no interfieran en el mecanismo de acción de la boya (unos cantos rodados, o un ladrillo por ejemplo) para que así disminuya el volumen de agua que entra en la cisterna cada vez que “tiramos de la cadena”.
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